Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra que me llevare el blanco día,
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera:
más no, de esotra parte, en la ribera,
dejará la memoria, en donde ardía:
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.
Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
venas que humor a tanto fuego han dado,
médulas que han gloriosamente ardido,
su cuerpo dejará, no su cuidado;
serán ceniza, más tendrán sentido;
polvo serán, más polvo enamorado.
Francisco de Quevedo
Hasta pronto, mi amor.
Hello Isabel,
ResponderEliminarsweet witch :)
Take good care of you
hugs
Hello Isabel,
EliminarYou are feel well?
Hope so
hugs
Una bella bruja.....Saludos.
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